Arte
El nuevo director del museo de Rubielos de Mora es un viejo amigo de Andalán: Ricardo García Prats, experto en arte contemporáneo que ha dedicado su vida profesional a la docencia, a la divulgación y a la crítica de arte. Tras la dimisión por razones profesionales del anterior director, Diego Arribas, Ricardo afronta la dirección con el fin de dar visibilidad a la obra de Salvador Victoria y dinamizar la exposición permanente que se expone en el museo mostrando obras menos conocidas de artistas contemporáneos.
García Prats, turolense de Puertomingalvo, fue director general de Acción Cultural del Gobierno de Aragón, de 1985 a 1987, y director provincial de Educación de Teruel de 1994 a 1996, entre otros cargos. Profesor del Instituto de Fraga, durante veinte años ha programado las exposiciones del Palacio Montcada, y ha sido comisario de numerosas exposiciones y crítico muy respetado en diversos medios. Nuestra felicitación y los mejores augurios.
Y satisfacción porque se ha inaugurado allí una importante muestra del fallecido artista Joan Hernández Pijuán, el gran pintor catalán hijo del periodista aragonés José María Hernández Pardos, que permanecerá abierta hasta el 2 de julio.
(En la foto, García Prats con la presidenta de la Fundación, Marie Claire Decay, y Ángel Gracia, tantos años alcalde de Rubielos y gran impulsor del Museo).
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Aprovechamos para dar noticia en esta sección del nuevo libro de Jesús Pedro Lorente, Arte público en Aragón. Nuestro patrimonio colectivo al aire libre, publicado por Rolde que nos informa de que este libro ofrece una panorámica representativa de las principales tipologías de un arte que es “un espejo en el que continuamente nos miramos todos al pasar… imagen de marca de cada barrio, pueblo o ciudad, comarca y territorio.”. También que se trata de explicar esas obras de arte “en función de su carácter público, tanto en términos de propiedad como de uso… esculturas, pinturas y otras artes ornamentales visitables cualquier día u hora”. Y ello, “para dar a conocer mejor este patrimonio colectivo y, por ende, contribuir a su aprecio, disfrute social y protección”. El libro contiene una serie de excelentes ilustraciones fotográficas.