60 medidas contra el caos (14). Economía (continúa)
58. La Galaxia Bancaria. “Las autoridades europeas han decidido ponerse al lado de los banqueros. Si los banqueros han conseguido poner a sus órdenes a los gobiernos con tanta disciplina, y especialmente en España, también es por algo… Han conseguido imponer a la sociedad la doctrina neoliberal, según la cual la economía sale adelante sólo si se dan alas al sector privado”. [1] ”Hay que acabar con el régimen de supervisión light que existe en Europa sobre la banca. Los engaños y malas prácticas ya han producido en España alrededor de 600 sentencias condenatorias de bancos. Por cierto, sin que ningún gobierno tome nota y actúe frente a esta auténtica pandemia”. [2] Sólo en la llamada “estafa de las preferentes”, había en mayo de 2011 en España “un total de 22.000 millones de euros ‘invertidos’ en estos productos financieros”.[3]
59. ¿De dónde salen las “indemnizaciones” millonarias? ¿De los dividendos a los accionistas? ¿O de los excesivos intereses o comisiones por depósitos de clientes? Todos hemos visto publicadas las “indemnizaciones” millonarias que han percibido algunos gestores de Cajas después de llevarlas a pique. Pero este sistema absurdo “obliga a destinar docenas de miles de millones a salvar a los causantes de la crisis en lugar de encarcelarlos”. [4] En todas las Cajas y Bancos sostenidos con dinero público, deben regularse (y publicarse) sueldos, dietas, indemnizaciones, gratificaciones, pensiones y asimilados. No es justificante el cuento de que “hay que pagarles como en los bancos privados para mantenerlos aquí”. Pues no, en esas condiciones, es preferible que se vayan: queremos trabajadores, no sanguijuelas. Además, siempre surgirá gente cualificada que hará lo mismo o mejor por menos dinero. Esto vale también para los demás ejecutivos o políticos, estatales, autonómicos, provinciales y municipales.
60. “De mayor, yo quiero ser banquero”. En abril-2013, Alfredo Sáenz, número dos del Banco Santander, dejó ese trabajo. El banquero tenía derecho a una pensión de 88,17 millones de euros. Además, el banco le tiene contratado un seguro de vida por valor de 11,1 millones €, que sólo podrá cobrar en caso de invalidez, o sus herederos en caso de fallecimiento. Las jubilaciones doradas son comunes en la alta dirección del sector bancario. El presidente del BBVA, Francisco González, tiene derecho a cobrar 79,7 millones cuando finalice sus labores ejecutivas. Y el que fuera número dos del BBVA, José Ignacio Goirigolzarri, cuando dejó el banco en septiembre de 2009, cobró una pensión de 68,7 millones.[5] Hablamos de dos bancos muy potentes. Pero los ciudadanos civilizados no nos acostumbramos a las excesivas diferencias económicas entre profesiones, no “por envidia”, sino por justicia. El último salario mínimo interprofesional español –SMI- fue 9.034,20 euros en 2013 (645,30 €/mes) y prorrogado (congelado) para 2014. En un trabajador que cobre cuatro veces el salario mínimo (4 smi), o sea, 36.136,8 € brutos al año, los 88,17 millones del Sr Sáenz equivalen a 2.440 años en la vida de ese trabajador. Y si cobrara 27.102,6 al año (3 smi), serían 3.253 años. Por mucho que se quiera “adornar”, estas cantidades escandalosas (que no salen de los accionistas, sino de los clientes) están en ”fuera de juego” dentro de una sociedad democrática y deben regularse públicamente, incluso por respeto a los banqueros (si es que les queda algo).
[1] Vicenç NAVARRO, Juan TORRES y Alberto GARZÓN (2012): Lo que España necesita. Barcelona: Planeta, pp. 154-155.