Defender el paisaje y la historia
A Angelines Villacampa, un paisaje humano.
“Me conviene todo lo que está de acuerdo contigo ¡oh mundo!; nada es prematuro ni tardío para mi si es oportuno para ti. Es para mi fruto todo lo que me traen tus horas ¡oh naturaleza!. Todo está en ti, todo vuelve a ti.”
Marco Aurelio, filósofo estoico
Un paseo diario por el campo pirenaico, a las ocho de la mañana, supone recibir los mejores aromas del campo que ha descansado plácidamente durante la noche y comienzan a ser visitados por el sol.
Leer a Virgilio, sentado en una piedra cerca del rio Gállego, es un marco donde las palabras alcanzan otra dimensión.
“dichoso el que conoció a los dioses del campo, Pan, el viejo Silvano y las hermosas ninfas. A éste no le doblegaron ni las fauces otorgadas por el pueblo, ni la púrpura de los reyes, ni la discordia que atormenta a los hermanos desleales, ni los asuntos de Roma, ni los reinos abocados a perecer: éste ni se dolió, compadeciéndolo, del pobre ni envidió al que tiene. Cogió los frutos que las ramas, los que los mismos campos, de su propia voluntad y sin intervención ajena produjeron, y ni vio las leyes de hierro ni el foro alborotado ni los archivos del pueblo”.
BARBENUTA Y ESPIERRE
Sobre los paisajes de la tierra de Biescas, con ermitas mozárabes, se levantan paisajes humanos de personas que orientan la brújula de su vida a cuidar sus raíces, su paisaje, lugares donde discurrió su infancia. Es el caso de Angelines Villacampa.
Lourdes Ramón, prima hermana y familia de los Ramón y Cajal de Larrés me invita a recorrer con su Suzuki pueblos abandonados y otros mejor cuidados.
Barbenuta y Espierre se están levantando. Muchos vecinos conocen a Lourdes porque tuvo carnicería en Biescas. Observo cariño y ánimo por las viejas piedras. Una gata embarazada se acerca a nosotros, se deja acariciar y coger en brazos, con una mirada muy tierna. Le deseamos un parto feliz y gatitos buenos y guapos. Hablamos con el alcalde y tiene buenos proyectos e ilusión en continuar haciendo crecer el pueblo.
Las iglesias del Serrablo están bien cuidadas en su mayoría. Han penetrado en la cultura popular. El papel llevado a cabo por Amigos del Serrablo conducidos por Julio Gavín es ejemplar y ha dejado una arraigada tradición de amor a las piedras desde los años setenta del pasado siglo.
San Bartolomé de Gavín, Santa Eulalia de Orós bajo, San Martín de Oliván, San Juan de Busa, están próximas a Biescas y se puede llegar a pie, con algo de ánimo.
Otal, Espierre, Susín, Satué, Lasieso, Isún, Arto, Ordovás, Orna, Basarán, Latre y Javierrelatre, son perlas que esmaltan el paisaje. En Javierrelatre aprendió el oficio de cirujano-barbero Justo Ramón Casasús, padre de Santiago Ramón y Cajal. Lárrede es una de las iglesias-estrellas de la zona y tiempo atrás se celebraba misa en rito mozárabe el día de San Pedro.
BASARÁN, CORTILLAS Y CILLAS
El paisaje cambia sensiblemente al llegar a Basarán. Es un paisaje desolado, digno de un paisaje de post-guerra que podía pintar Max Ernst. La iglesia fue trasladada a Formigal, donde emerge entre la nieve.
Cortillas, tiene latidos de vida. Algo se restaura y se mima. Algo se proyecta. Hay piedras alineadas con ilusión, se apoya a la ganadería.
No logramos localizar a Cillas y tras dar algunas vueltas acudimos a Susín.

Santa Eulalia de Susin
ANGELINES VILLACAMPA Y SUSIN
Angelines Villacampa nos enseña la casa donde reside. Hay un absoluto respeto al viejo Susin, donde vive como única residente. Allí se alza airosa la ermita de Santa Eulalia.
Todo está cuidado con amor y respeto a la historia. Parece un museo etnográfico. Los árboles floridos rodean su casa. Hablando descubre su sensibilidad poética y una gran convicción y fuerza mental para luchar y reivindicar ayudas para Susín. Es una mujer emotiva y con objetivos claros.
No está de acuerdo con el traslado de pinturas murales como “Os llorones” (los llorones) que se fueron al Museo Municipal de Jaca en 1966. Fueron arrancados y por tanto descontextualizados, me dice.

Angelines Villacampa
JACA
Jaca es una bella ciudad con una impresionante catedral románica.Las capillas de San Miguel y Santa Orosia son de gran belleza. Recorriendo su museo puedo escuchar los diferentes toques de campana: Claustral, coro, diurno y angelus, minerva y muerte de canónigo.
Hay pinturas murales de Navasa, Urriés, Sieso, Cerésola, Ipas, Sorripas, Concilio, Sala, Bagués. La sala Bagues consiste en una dependencia adaptada para que las pinturas adquieran (la misma configuración que tenían en la iglesia primitiva). Fue una iniciativa de Gudiol Guitart cuando comprendieron que debido a la despoblación de los pueblos aragoneses en los años 60 las iglesias tenían riesgo de derrumbamientos y las pinturas podían desaparecer. Fue un necesario mal menor
Saludo en Jaca al amigo farmacéutico Carlos Lacadena y compro dulces de la pasteleria Echeto que me trae bellos recuerdos paternos.
“Os llorones” deben seguir llorando por haber dejado Susín. Parecen corresponder a un calvario. Algunos expertos lo relacionan con el maestro de Tahull. Una bella pintura románica.

Os llorones en el Museo Diocesano de Jaca / foto: www.romanicoaragones.com