Por las azules aguas del Egeo
“Al comienzo Eurinomé. diosa de Todas las Cosas, emergió del caos, pero no encontró nada consistentedonde posar sus pies; por ese motivo separó la mar del cielo y , solitaria, danzó sobre las aguas”
R Graves. Los mitos griegos
Tras la primera semana por tierras helénicas me voy impregnando de la fuerza oculta de esta adorable tierra. Es como el canto de la tierra de Mahler. Me transmite los efluvios de lejanas y grandiosas creaciones artísticas, que piden sosiego y reflexión para acercarse a ellas. Y las islas llaman al viajero, por ese mar de la civilización y acude a mi mente ese viaje desde Turquía a Sicilia que realizó Ulises- el viaje a Ítaca. La odisea es mi compañero de viaje.

Esculapio de Ampurias
Ayer volví a Micenas con su puerta de los leones y una piedra de 120 toneladas, si no recuerdo mal. Coincidí con un grupo de profesores argentinos muy versados en poesía bucólica griega.
En Epidauro volví a impresionarme con su anfiteatro y su magnífica acústica por cuyas piedras se han deslizado voces como las de María Callas, Montserrat Cabelle y José Carreras.
El clima de primavera es excepcional recuerda la vibración de la media montaña pirenaica. El dios Esculapio supo elegir bien el lugar para sus pacientes y unas técnicas y remedios que también iban dirigidas al corazón.
TEMPLOS DE ESCULAPIO
Los templos dedicados a Esculapio tenian,baños patios y alamedas.En el centro estaba el templo dedicado a Esculapio adornado con obras de arte y otros tesoros.Al lado el abaton donde los peregrinos se retiraban para ser visitados por el dios en sueños.Algunos tenian baños, posadas y gimnasios.La terapéutica se basaba en la sugestión e interpretación de los sueños, curas físicas y climáticas, purificaciones y dietética. Creo que practicaba una buena medicina psicosomática. Quizá nuestros balnearios tienen muchas cosas comunes.
Según las inscripciones Esculapio curaba la parálisis,la epilepsia, la ceguera, la calvicie, la hidropesía, las heridas, las cefaleas, la esterilidad, las lombrices, la tuberculosis, la dispepsia,la gota y protegía la salud de la familia.
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HACIA LAS ISLAS
Dios bendiga las generosas islas
a donde no llegan órdenes de captura
Dios bendiga las justas repúblicas
que dan hogar a un hombre
Rudyard Kipling
Quiero pasar unos días porlas islas próximas. Si me enamoro de alguna me quedaré allí.

Hermes o Mercurio de Giambologna
El barco se llama Hermes, dios asociado a múltiples actividades, desde el comercio a la medicina y que tantos escultores han inmortalizado. También Juan Abadía, maestro de dibujo de Santiago Ramón y Cajal, lo tiene representado en el encantador comercio de “La confianza” en la plaza López Allué de Huesca.
El barco zarpará a las 12. El mar está acompañado por una ligera bruma. Pronto se despeja y copia el límpido color del cielo.
El ambiente del puerto es de mercado: pescados, frutos de tierra, pistachos.Gente sonriente y muy dicharachera.
El golfo sarónico es una delicia azul, con puntos blancos en la lejanía. Me sumerjo en esta atmósfera onírica y voy tomando notas y apuntes.
Una señora uniformada, que parece azafata o relaciones públicas del barco, se acerca y con gran delicadeza me pide permiso para sentarse en mi mesa, con su hija-Jara- ya que le ha sorprendido verme escribir y dibujar en mi “cuaderno de bitácora”. Me pregunta si viajo solo y pide permiso para hojear “La Odisea” de editorial Cátedra, que viaja conmigo y está sobre la mesa.
–Un gran libro, tiene usted en sus manos. Yo lo he leído varias veces. Me diplomé en cultura mitológica griega y soy guía turística.
Dos gaviotas se acercan mucho al barco y Nikolai se acerca a la barandilla de popa.
–Es que quieren leer lo que usted escribe...
Un camarero solicitado por la azafata , me invita a un café griego, que hay que beberlo “con mucho ruido”
Jara ha conseguido que su hija se siente con nosotros frente a un gran helado rosa que le ha abierto los ojos desmesuradamente. Se llama Nikolai y tiene 6 años.
El mito de Sisifo de la Odisea fue rescatado por Freud. Había cometido mil pecados como de secuestrar a Tanatos de modo que nadie moría en aquellos tiempos sobre la tierra ¡vaya drama!. Al final Ares liberó a Tanatos y Sísifo fue condenado a elevar una roca a la cima de una enorme roca a la cima de una colina, y al final volvía siempre a su lugar de origen. Albert Camus se inspiró en este mito para su obra literaria.
Jara habla a Nikolai (en griego) y a mi (en español) de Silvano, dios nemoroso y campestre. De las sirenas que enamoraban a los navegantes de este mar y eran muy peligrosas. Ulises supo resistir la tentación. De Siringa supo resistir el acoso de Pan, y se encomendó a las ninfas fluviales que la transformaron en caña de río. Pan hizo de su caña una flauta y se llamó flauta de Pan.
El gran helado de Nikolai se ha terminado. No se si ha formado en mitología pero la copa ha quedado limpia, limpia.
-Adios . Señor.Muchas gracias,Sobre todo por amar tanto La Odisea, que es amar a nuestro pais.
-Adios Jara. Adios Nikolai.
He leído que un país sin leyendas se moriría de frío y un pueblo sin mitos está muerto. Son los fundamentales historias de la tribu que ofrecen a sus creyentes, una interpretación del sentido del mundo. El ser humano aspira esperanza y consuelo y el mito lo ofrece. Nos han llegado bellos mitos que tienen la altura de los sueños de los humanos: Prometeo, Edipo, Medea, Orfeo.

Homero de Philipppe Laurent del Museo del Louvre
ISLA DE HYDRA:

Isla de Hydra
He parado en varias islas pero Hidra me muerde el corazón. Es la isla culminante de mi recorrido. La alfombra azul, el centelleo vibrante, el dialogo sosegado con las olas que se acercan “dialogando buenas y bellas noticias” como dijo un poeta. La bruma de los mitos, el deseo, el sueño, el recuerdo, el rito del mar, la magia. Y después el silencio terso del mar azul.
No hay coches en la isla. Caminan muchos burros. Un gato me visita y se deja acariciar mientras come un buen trozo de pescado que ha salido de mi plato.
La bahía es hermosa. Recuerdo la de Port Lligat en Cadaqués y aquel rincón mar que se viste muchos días con su lámina plateada.
Me quedaré unos días mirando el mar. Quizá sueñe esta noche con Poseidón, dios de las aguas.
«Pronto Poseidon bajó del escarpado monte con ligera planta; las altas colinas y las selvas temblaban bajo los pies inmortales, mientras el dios iba andando. Dio 3 pasos y al cuarto llegó a su destino, a Egas; allí en las profundidades del mar tenía palacios magníficos de oro, resplandecientes e indestructibles. Luego que hubo llegado unció al carro un par de corceles de cascos de bronce y aureas crines que volaban ligeros y seguidamente envolvió su cuerpo con dorada túnica, tomó el látigo de oro hecho con arte, subió al carro y lo guió por encima de las olas. Debajo saltaban los cetáceos que salían de sus latebras reconociendo al rey; el mar abría gozoso sus aguas y los ágiles caballos con apresurado vuelo, sin dejar que el eje se mojara conducían a Poseidon hacia las naves aqueas”

Poseidon de Artemision