Y dos novelas muy renovadoras

Listen to me, de Manuel Vilas (La Bella Varsovia), muestra una literatura viva, inquieta, divertida, creativa, a la que estábamos acostumbrados, de ahí nuestra busca rápida y nuestra lectura muy complacida. El gran escritor barbastrense se reta a sí mismo en el más difícil todavía. Lo ha hecho también con el erotismo y la pornografía, al parecer con un gran éxito: asustando, enfadando, asombrando, entreteniendo a la mayoría de los lectores, entre los que, por ahora, no se cuenta el firmante.

Por otra parte, el belchitano Félix Teira, otro veterano y reputado autor, publica Hijos y padres (Funambulista) que, si bien se nos presenta como una mirada corrosiva de los jóvenes sobre las familias sacudidas por la crisis, es también un análisis perfecto de esos mismos jóvenes, de su lenguaje, sus frustraciones, sus modos de expresión, sus agarrotadas esperanzas. Félix lleva décadas de excelente ejercicio como profesor de Secundaria, de conversaciones con sus alumnos, y, como hace más de medio siglo ocurrió con El Jarama de Sánchez Ferlosio, este libro ofrece el habla de ese complejo, raro, interesante mundo de la adolescencia y primera juventud, que rompe con casi todo.